Un poco de nosotros

Esta aventura comenzó como una más de las muchas que empezamos en nuestro devenir por la vida. Con una ilusión compartida por participar en la primera carrera de 24 horas en bici que se realizaba en España (24Doce) y con la ayuda indiscutible de Santi y su entrega por compartir todo aquello con nosotros. Y allí que nos apuntamos 8 gatos poco duchos, que querían dar 35 vueltas en 24 horas, de ahí nuestro nombre “35birras” (1 cerveza por vuelta), que nos pareció razonable, por supuesto nuestra estimación ni se aproximó a la realidad. Pero aquel día nos daba igual las vueltas que hacíamos, el tiempo que empleábamos y el cansancio que teníamos, lo importante era vivir aquello tal y como lo vivimos...

Al año siguiente no se distanció mucho de éste, ya que nos creímos perros viejos al menos para esta carrera y nos apuntamos a la modalidad de 12 horas porque pensamos que sería más fácil, eso sí, ya eramos 3 grupos de cuatro en vez de 8 gatos...

domingo, 6 de julio de 2014

6/7/2014 Fuenlabrada - El Álamo

A las 9 de la mañana, hoy todos puntuales, nos hemos presentado en Fuenlabrada Oscar, Sergio Feito, Sergio Pérez y Santiago, para hacer la ruta del Alamo. La verdad es que al principio no estabamos muy seguros de la ruta, pensando en el calor que ibamos a pasar, pero hemos tenido mucha suerte y nos ha hecho una temperatura muy agradable durante la ruta, que nos ha permitido rodar bastante bien.
A las 9:10 nos poníamos en marcha con Oscar haciendo de guía, que es el que se la conoce. Nos sacó de Fuenlabrada en un periquete, dejando a nuestra derecha Loranca  y enseguida cogimos una senda ancha, que nos sacaba de Fuenlabrada con un inicio de ruta cómodo por tramos de carril bici y pista ancha, en llano y bajando (pero no nos olvidemos que todo lo que se baja hay que subirlo) que nos va llevando a Arroyomolinos, cruzándola por el Pasaje de la Dehesa sin tocar asfalto en ningún momento. Hasta llegar a esta localidad, todo muy tranquilo y rodando a buen ritmo, haciendo en este primer parcial unos 16,50 km a la hora.
Al salir de Arroyomolinos comenzamos ya a subir, para acercarnos a una zona bastante técnica, con unas trialeras bastante divertidas aunque algunas complicadas que discurren por el barranco del Pastor, que pasamos sin muchas complicaciones, aunque aquí se nota el buen estado de forma física y técnica de Oscar y Sergio Pérez, que nos dejan atrás y nos esperan al finalizar la trialera. Una vez que esta finaliza, nos volvemos a dirigir al mismo punto por el que cogimos esta trialera, que primero discurre por un camino llano, para terminar subiendo una subida de unos dos kilómetros y medio con un desnivel medio de unos 5 grados.
Al llegar al punto en el que cogemos la trialera, paramos a hacer un descansito, tomando unas barritas y algo de líquido, para reponer algo de fuerzas.
Cogemos de nuevo un sendero bastante cómodo para rodar, que discurre por la Avenida del Monte de Batres, en este punto, cogemos un pequeño desvío, para poner a prueba nuestra destreza y fuerza en una bajada y subida técnica, donde los dos menos duchos hemos echado pie a tierra, para evitar dar con nuestros huesos en el suelo y hemos vuelta a salir de nuevo a la anterior avenida, donde hemos pasado por una zona de sube y baja rompepiernas, por la que hemor rodado a buen ritmo, cogiendo luego un camino que discurre paralelo a la AP41 y que nos lleva a Moraleja de Enmedio, donde nos esperaba una subidita por medio de la población, donde yo ya me he venido abajo y he ido viendo como me quedaba solo, aunque he de decir, que me he sentido bastante mejor que en la ruta de la última semana, a ver si termino de ponerme un poco en forma y por lo menos estas cuestas no se me atragantan tanto. Nada más salir de Moraleja de Enmedio, cruzamos la M407 por un paso elevado y lo de elevado va en serio, joder, una cuestecita que no tendrá más de 150 metros, pero con un desnivel, para llegar a lo alto del puente de un 15% , que nos hace sudar y sufrir, aunque como siempre a algunos más que a otros y ya después de esta última puntillita, desde allí, por un camino bastante llano y llevadero nos hemos acercado a Fuenlabrada, donde como es costumbre nos hemos tomado unas cervecitas,  a las cuales Oscar no ha podido quedarse por que tenía un compromiso familiar. La verdad es que terminar la ruta con una jarrita helada en la mano, te da la vida y si como es este caso, encima con los aperitivos que nos han puesto hemos comido, más todavía.
Agradecer a Oscar el enseñarnos esta ruta que la verdad es que está bastante chula y para los tiempos más fríos que va a ser una de las que repitamos.
(por Santiago)

Puedes consultar el track en Wikiloc pinchando aquí.
Puedes consultar el track en Garmin Connect pinchando aquí.
Puedes consultar el índice IBP pinchando aquí.

martes, 24 de junio de 2014

21 de Junio de 2014. Pontón de la Oliva - Alpedrete

Después de un parón en nuestra actividad bicicletera, esta mañana, a las 9:00, hemos quedado en el parking del Pontón de la Oliva, 4 ciclistas (más bien 3 ciclistas y medio, por que yo tengo un estado de forma física deplorable) Oscar (que viene equipado con la camiseta del equipo), Carlos, Sergio y Santiago. La mañana se mostraba un pelín nublada, pero no parecía que se esperasen lluvias, así que una vez montadas las bicicletas y todos nosotros listos, comenzamos la ruta, saliendo desde el parking hasta la presa del Pontón de la Oliva, donde cogemos la vía de servicio del Canal, que comienza con unos kilómetros de subida por asfalto que nos llevan hasta el pueblo de Alpedrete de la Sierra. Esta primera parte la hacemos sin contratiempos, aunque se hace patente que llevo unos meses sin coger la bicicleta y en esta primera subida que por lo general hago de manera bastante holgada, me dejo los higadillos, aunque es de agradecer que Sergio me fue esperando durante toda la ruta, así que mi preocupación y ocupación fue la de no perder su rueda, para pasar estos km sobre pista. En la entrada del pueblo de Alpedrete nos estaban esperando Carlos y Oscar que han demostrado su buen estado de forma y han ido tirando durante toda la ruta.
Tras cruzar el pueblo, nada más salir de este nos para un vecino del mismo, para avisarnos que tengamos cuidado, que parece que hay algún malnacido (por no darle algún epíteto más cariñoso) que parece que se dedica a sembrar de trampas para ciclistas algunas sendas y trialeras de la zona. Nos avisa que la semana anterior, habían salido cuatro ciclistas y los cuatro habían pinchado, por que en una senda el susodicho, había puesto una chapa con clavos semienterrada en el suelo y los 4 pasaron por encima. En principio no tenemos coger ninguna senda, sino que vamos a ir por caminos principales, por lo que parece que hay pocas probabilidades de encontrarnos con alguna de estas trampas, aunque por si acaso, ponemos mil ojos en el camino, no vaya a ser que nos llevemos algún susto.
Los dos kilómetros de bajada que hay según salimos del pueblo me dan un poco de cancha y me ayudan a recuperar un poco, aunque en cuanto llega la subida, veo que mi supuesta recuperación no es más que un espejismo, por que ya en los tramos iniciales, que son bastante suaves, veo impotente, como Carlos y Oscar, hablando como si nada y con una cadencia que parece bastante cómoda se van alejando, Sergio, sigue conmigo, así que por lo menos voy acompañado.
Más o menos cuando llevamos un km de subida, tenemos el primer incidente del día, Oscar (yo creo que lo ha hecho a posta para darme un respiro decide pinchar, así que momento relax, para arreglar el pinchazo (pellizco con la cubierta y la llanta) Una vez arreglada, de nuevo cuesta arriba y otra vez vuelvo a ver solo los traseros de mis compañeros, aunque por poco rato, por que poco a poco se van alejando hasta perderlos de vista.
Al llegar a lo alto, más o menos en la mitad de la ruta, hacemos una parada, para tomar las consabidas barritas, beber un poco y comentar lo que llevamos de jornada.
Ahora comienza una bajada larga y divertida que nos lleva a la presa de la Parra en el río Lozoya. Nada más cruzar la presa, recordamos cuando realizamos la misma ruta el año pasado y Vicente y Raúl decidieron que era un buen sitio para tomar un baño. La verdad es que hoy la temperatura acompañaba, pero decidimos seguir adelante, a ver si conseguímos terminar pronto y nos podemos tomar unas birritas, para hacer honor al nombre de nuestro grupo.
Comenzamos con los 4 kilómetros llanos de la ruta, los cuatro juntos, aquí si que aguantamos todos el ritmo, cuando de repente nos percatamos que Carlos y Sergio se han parado, segundo incidente de la jornada, Sergio ha pasado por encima de un mojón que ha dejado alguna vaca recientemente y necesita parar para limpiarse y limpiar la bici y evitar ir repartiendo mierda lo que queda de ruta. Una vez efectuada una pequeña limpieza, comenzamos a rodar para llegar a los últimos 3 km de subida que nos acercan al parking, donde hemos dejado los coches. De nuevo un sufrimiento esta última súbida, pero saboreando la cervecita que nos esperaba al final, hacemos un último esfuerzo, apretamos los machos y tiramos para delante, como Hommer Simpson con un único pensamiento en mente (CERVEEEEEZAAAAA) Una vez en lo alto, cogemos el tramo de GR-10 que nos lleva al parking, donde guardamos las bicis y ponemos rumbo a Patones de Abajo a saborear nuestra recompensa que la tenemos ganada.
A título personal, decir, que hace mucho tiempo que no me encuentro tan mal físicamente y quiero agradecer a Sergio que fuese haciendo de angel guardián durante la ruta, espero volver a estar pronto en mis condiciones habituales, que tampoco es que sean para tirar cohetes.
(Por Santiago)

Podeis consultar el track de la ruta en Wikiloc pinchando aquí.
Podeis consultar el track de la ruta en Garmin Connect pinchando aquí.
Podeis consultar el índice IBP de la ruta pinchando aquí.

miércoles, 26 de junio de 2013

23/6/2013 Pontón de la Oliva - Alpedrete (Ruta para informáticos)

Esta crónica no comienza como el resto, Ruta para informáticos, a que carajos viene ese nombre, ni más ni menos a que el susodicho día en el parking del Pontón de la Oliva todos los que nos presentamos eramos compañeros del sector, vamos de esos tíos raros que solo piensan en ordenadores, juegos de rol, juegos de cartas..... pero como es posible que nos hayamos juntado 7 de estos locos a montar en bici. Pues allí que estabamos 4 de los habituales: Vicente, Damian, Rulo y Santiago (el que suscribe) con nosotros se vinieron a rodar 3 más que esperemos que se conviertan también en habituales, Sergio, Carlos y David.
Después de los preliminares vamos con la crónica, comenzamos la ruta con algo de retraso, por que a Vicente le pilló un accidente de camino y eso le obligó a retrasarse, así que en lugar de las 9:15 más o menos que hubiera sido la hora de salida, comenzamos a rodar media horita más tarde. Salimos como es lógico todos juntos y la primera anécdota, nada más bajar las escaleras que hay al otro lado del parking, Raúl, Vicente, David y Damian (a pesar de que alguno ya han hecho la ruta más de una vez) se tiran por el lado equivocado, menos mal que nos llevamos walkies y enseguida enmendamos el error, con un comienzo así la ruta prometía.
Comenzamos a subir, cada uno a su ritmo, aunque hay que decir que todos fuimos bastante bien, reagrupándonos en el mirador que hay con vistas al río Lozoya, donde suelen dejar los coches la gente que viene a Patones a escalar. Una vez allí, decidimos que cada uno fuesemos a nuestro ritmo hasta llegar a Alpedrete de la Sierra, que es donde finaliza la subida inicial. Con unos 10 minutos de diferencia fuimos apareciendo desde el primero hasta el último. David y Damian que venían al final, llegaron prácticamente juntos y David nos cuenta que veía extrañado como en cada pequeño tramo de bajada que había hasta llegar a Alpedrete veía como Damian le pasaba a toda pastilla, hasta que para y se da cuenta que lleva la rueda delantera prácticamente frenada, esto si que es un machote, la primera subida, ni más ni menos que 8 km, se la ha hecho con la rueda casi bloqueada, yo creo que era la excusa para poder entrar en calor.
Tras volver a reagruparnos cruzamos Alpedrete y tomamos el camino que a la salida del pueblo nos lleva a la segunda subida de la jornada, esta de solo 2 km y a la sombra de los pinos, así que bastante más llevadera. En lo alto paramos como de costumbre a amenizarnos con nuestras bebidas isotónicas, barritas, frutas, etc, para recuperar un poco las fuerzas y encarar la última parte de la ruta. Aquí, como hay gente nueva y algunos no tan nuevos, pero olvidadizos, repasamos ligeramente por donde tenemos que bajar y con los walkies nos vamos indicando, hasta llegar al camino que todo en bajada nos lleva hasta la presa de la Parra en el río Lozoya. Esta bajada la hacemos a todo lo que damos y nuestros amigos Raúl y Vicen nos graban con sus regalitos, dos GoPro que les han regalado. Habrá que esperar a ver los vídeos a ver si de verdad vamos a tumba abierta o más bien nos dedicamos a pasear a Miss Daisy. En la Presa de la Parra, hacemos una pequeña parada para hacernos las típicas fotos y viendo el calor que hace y lo clara que está el agua, alguien dice: Pues estaría bien pegarse un baño..... dos segundos de silencio, hasta que alguien suelta la fatídica frasecita: No hay "Guebosssss" y para que quieres más, aún quedan en el aire los ecos de la frase cuando Raúl y Vicen, ya despojados de camisetas, moviles, aparatos electrónicos, cascos, etc... hacen buena la frase de que al macho latino no le arredra nada cuando se han puesto en juego los atributos masculinos. Dicho y hecho, en un santiamén, bajan al río Lozoya por el lado contrario a la presa y en una poza se pegan un chapuzón, aprovechamos para hacerles fotos, videos, coñe y a llenar los bidones que vamos casi sin agua, total, lo peor que nos puede pasar es que estemos unos días con diarrea, aunque tenemos en mente matar cualquier posible virus, bacteria, elemento extraño con un poco de alcohol al finalizar la ruta así que no hay problema.
Una vez que nuestros compañeros se han vuelto a preparar para la ruta, nos ponemos en marcha, haciendo los 4 únicos kilómetros de la ruta llanos a buen ritmo y todos junticos. Al comenzar la última subida, aquí ya nos volvemos a estirar y cada uno sube como buenamente va pudiendo y según vamos llegando a la cima todos tirados al suelo a la sombra, vaya panda de mataos, jejeje. Desde aquí ya por fin la bajada, por un tramo del Gr-10 que desde luego no debía estar pensado para bicis, por la cantidad de piedras que tiene y directos al parking a guardar las bicis y a meternos en los coches que en Patones, que por cierto estaba en fiestas, nos estaban esperando unas rubias espectaculares en jarra helada, amenizadas con unos chorizitos, cortecitas, en fin, que había que reponer lo perdido en la ruta. Indudablemente esta parte la mejor, buena compañía, buenas bebidas, risas, comentarios, planes para próximas salidas, que esperamos que sea en breve. De esa sobremesa salió la posibilidad de una nocturna que organizan en Patones el día 6 de Julio y una salida a subir la Hoya de San Blas.
(Por Santiago)

Podeis consultar el track de la ruta en Wikiloc pulsando aquí
Podeis consultar el track de la ruta en GarminConnect pulsando aquí
Las fotos y videos, espero publicarlas en breve.